relaciones maniacodepresivas desacademicas

me acerqué impulsivamente, sabía que algo extraño tenía
no me había dado cuenta del detalle de la barba, su actitud bipolar seguía intacta
vio mis ojos tristes y escuchó con atención
descargué toda la angustia
le explique mi proceso de reconciliación con la realidad según las enseñanzas maquiavelico-lerouxianas
hablé de las descargas de desalienación, la crueldad del mundo
y las paranoias caricaturescas
me explicó muchas cosas de introsubjetividad
hablo de mi voluntad y finalmente dijo algo así como::

deja de ver al Nietzsche nihilista... te vas a suicidar!, tienes que leer aquel libro rojo pero shhh, también busca dos con estas claves (******* - **) en el estante de la derecha
bien, lo descubriste, estamos dentro!!, tienes que actuar, encuentra y utiliza los huecos

investiga donde venden las ganas, o de esos cartones de huevos para la vida...
vive vive vivee!!!

y después vino el abrazo del 168/304 ( a la usansa de Acatempan), no hizo falta que me tocara, no hizo falta que lo dijera, supe que me comprendía, pude interpretar su piedad a través de las risitas breves y las miradas de juicio ausente.
El reflejo cíclico ya no terminará jamás...

Gracias Die!